Europa obliga a ChatGPT a ser transparente y a respetar los derechos de autor
Publicado el 02/08/2025 por Diario Tecnología Artículo originalLa Ley de IA de la Unión Europea sigue ganando peso. Después de su aprobación el año pasado, y de la entrada en vigor en febrero de las primeras prohibiciones , la normativa ahora pone coto a los modelos de inteligencia artificial de propósito general, entre los que se encuentran herramientas como ChatGPT , Gemini o Grok . Desde este mismo sábado 2 de agosto, las empresas desarrolladoras tendrán que cumplir con nuevos criterios de transparencia y seguridad siempre y cuando quieran evitar posibles multas. Estas pueden ascender hasta el 7% de la facturación global anual de la firma infractora o a los 35 millones de euros. A partir de ahora, cualquier desarrollador de una herramienta de inteligencia artificial capaz de generar texto, imagen, vídeo o voz deberá proporcionar información técnica clara y actualizada sobre su tecnología a las empresas que utilicen sus servicios y a las autoridades europeas, en concreto a la Oficina de IA europea. En esta se deberá explicar cómo fue capacitada y testada. Los desarrollos más avanzados, además, tendrán que realizar evaluaciones de seguridad de forma continua, informar sobre incidentes graves y hacer todo lo posible para que sus productos no sufran vulnerabilidades que puedan poner en riesgo los datos de los usuarios. Asimismo, las empresas creadoras de estas herramientas tienen la obligación de respetar la normativa de derechos de autor europea; para ello tendrán que compartir resúmenes públicos con los datos que emplearon para el entrenamiento de sus máquinas. Además, deben implantar sistemas que permitan a los titulares de los derechos a optar por no participar, negando el uso de sus contenidos para el desarrollo de la tecnología. Estas obligaciones deberán ser cumplidas por cualquier empresa que ponga tecnología de inteligencia artificial generativa en el mercado, como es el caso de Google, Meta, OpenAI o xAI. Afectará de lleno, por ejemplo, a GPT-5, la versión hipervitaminada de ChatGPT, que se espera que sea presentada antes de que finalice el presente agosto. Para facilitar a las compañías el cumplimiento de la normativa, la Unión Europea compartió a mediados de julio un código de buenas prácticas al que se pueden adherir de forma voluntaria. Compañías como Microsoft, OpenAI, Google, Anthropic o xAI ya han confirmado su firma; aunque en la mayoría de casos con reticencias. «Nos sigue preocupando que la Ley de IA y el código puedan ralentizar el desarrollo y la implementación de la IA en Europa. En particular, las desviaciones de la legislación europea sobre derechos de autor, las medidas que ralentizan las aprobaciones o los requisitos que exponen secretos comerciales podrían frenar el desarrollo y la implementación de modelos europeos, perjudicando así la competitividad europea», ha señalado Google en un comunicado realizado esta semana. La que ya ha anunciado que no tiene intención de firmar el código, aunque tendrá que cumplir con la normativa de igual modo, es Meta. La empresa dirigida por Mark Zuckerberg, que está quemando miles de millones de euros con el fin de crear la 'superinteligencia' -esa máquina que será más lista que el humano más listo-, cree que la normativa ahogará la innovación. «Frenará el desarrollo y la implementación de modelos de IA de frontera en Europa y obstaculizará a las empresas europeas que buscan construir negocios sobre ellos», afirmó Joel Kaplan, director de asuntos globales de Meta.