El ajo, las almendras y la conserva española soñaban con conquistar EEUU. Ahora comparten la pesadilla de sus aranceles

Publicado el 30/07/2025 por Diario Tecnología Artículo original

Los agricultores españoles suelen estar tan pendientes del cielo como de los despachos en los que se deciden las políticas que marcarán sus cosechas. Desde el domingo sin embargo los segundos pesan mucho más que lo primero o cualquier amenaza de sequía. El acuerdo firmado por la Comisión Europea y EEUU arroja la alargada sombra de los aranceles del 15% sobre su exportaciones transatlánticas, un panorama que observan con preocupación el sector del vino o el aceite, pero también otras con importantes intereses en EEUU, como la industria del ajo.

Hay desánimo y sobre todo cautela.

Un porcentaje: 15%. El pacto firmado en Escocia por Donald Trump y Ursula von der Leyen ha desatado una ola de reacciones a nivel política y económico. La razón: para evitar una guerra comercial de consecuencias imprevisibles y que llegó a amagar con aranceles del 50% a las exportaciones europeas en EEUU, Bruselas se ha resignado a asumir que la mayoría de las mercancías que venda al otro lado del Atlántico soporten una tasa del 15%, lo que les restará competitividad.

Esa es la línea gruesa. Luego está la letra pequeña, igual de importante. Por ejemplo, todo indica que el gravamen del 15% no será recíproco para EEUU e incluye el compromiso de que a lo largo de los próximos años Europa comprará productos energéticos 'made in USA' por valor de 750.000 millones de dólares. Otra clave es que el pacto prevé ciertas excepciones, productos que disfrutarán de un "aranceles cero por cero". El problema es que aún no se han definido.

Más allá del vino y aceite de oliva. Se sabe que en ese saco de mercancías con "aranceles cero por cero" se incluirán "productos estratégicos" para EEUU, como químicos, equipos de semiconductores, recursos naturales y "ciertos productos agrícolas". ¿Cuáles? ¿Cómo se aplicará la tasa al resto? He ahí dos claves.

Al poco de anunciarse el acuerdo dos de las ramas del sector más potentes y con mayores intereses en EEUU, el vino y aceite de oliva, no tardaron en elevar la voz para advertir del daño que les ocasionaría soportar un arancel del 15%. La patronal del vino (CEEV) calcula de hecho que un gravamen de ese tipo hundiría sus ventas un 10% en el país norteamericano. Los productores de aceite de oliva también han reconocido que la tasa del 15% es "totalmente negativa", aunque son cautelosos.

Las bodegas y almazaras no son las únicas que han mostrado su preocupación. Efeagro ha publicado una crónica en la que recoge las inquietudes de otros tres sectores que también han visto cómo su horizonte se complica con el acuerdo: la almendra, las conservas pesqueras y sobre todo el ajo, una industria crucial en el campo español. Aunque quizás no sea tan popular como su vino o aceite, España es una potencia mundial en el cultivo de ajo y el estadounidense un mercado clave.

El ajo tiembla. A principios de año FEPEX, la federación de asociaciones productoras de fruta y hortalizas, calculaba que solo durante los diez primeros meses de 2024 España había enviado 14.604 toneladas de ajo a EEUU, lo que la convertía en "la principal fruta y hortaliza exportada" por España al país, muy por encima de la cebolla (5.198 t) o el limón y la lima (1.927 t). Entre enero y mayo de 2025 ese flujo ha superado ya las 3.200 t con un valor de 15 millones de euros. Son datos interesantes, pero que muestran también lo expuesto que está a la tasa.

Productores tocados. "A falta de conocer los detalles del acuerdo y saber si las exportaciones de productos agrarios de la UE estarían gravadas por este arancel, los productores de ajo serían uno de los más afectados, puesto que es el producto más vendido dentro del sector de frutas y hortalizas frescas a EEUU con 3.248 t en el período de enero a mayo, lo que supone cerca del 70% de toda la exportación española en ese período", advierte la federación de productores españoles.

FEPEX recuerda que el valor de sus exportaciones representó durante ese mismo período (enero-mayo) el 75% del total anotado por el sector. A una distancia considerable en volumen de mercancía estaría la mandarina y el limón.

"Bajada de pantalón". La situación inquieta también a los agricultores dedicados a la almendra. La Asociación Española de Productores de Almendra Ecológica y Convencional ha reconocido que el acuerdo los deja en una situación complicada e incluso habla de "una bajada de faja y pantalones" de Bruselas al aceptar que el fruto europeo que quiera venderse en EEUU asuma unos aranceles que superarán con creces a las que se encuentra  americana en Europa.

En declaraciones recogidas por AgroCLM, la asociación tacha la situación de "injusta y desigual". "Certifica la traición de nuestras autoridades europeas con el sector agrario europeo y español". EEUU es el gran productor de almendras del mundo, con un aporte de alrededor del 85%, a años luz del 10% que representa la UE. Dentro de la producción europea España tiene una posición destacada.

La conserva, expectante. Otro sector pendiente de que se vaya perfilando la letra pequeña del acuerdo suscrito por Trump y von der Leyen es el de la conserva pesquera. Roberto Alonso, de Anfaco-Cytma, reconoce a EfeAgro que la industria espera conocer los detalles técnicos del acuerdo y "cómo se aplicará" el 15% a la hora de la verdad. "No solo exportamos productos al mercado de EEUU, como pulpos, sepias, calamares o mejillones, también importamos materias primas como el abadejo para surimi o merluza, no sabemos que arancel tendrán”.

"La imposición de aranceles tiene impacto sobre el comercio. Habrá que esperar a conocer cómo se comporta el mercado y también las relaciones entre operadores tras conocerse todo", recalca Alonso. Cuando hace unos meses Trump anunció que impondría un arancel del 20% a las importaciones europeas, Anfaco admitió estar "preocupada" por el peso del mercado estadounidense para sus empresas. Solo en 2024, recordaba, España exportó a EEUU más de 26.000 toneladas de productos del mar de diferente tipo por un valor que rondó los 290 millones de euros.

Imágenes | Kairi Kaljo (Unsplash), CE y Gage Skidmore (Flickr) 1 y 2

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