Los Shelby de Peaky Blinders fumaban como una carreta, aunque la verdad detrás de tanto humo tenía truco

Publicado el 07/09/2025 por Diario Tecnología Artículo original

Si hay algo que no se puede poner en duda es que Cillian Murphy es un actorazo desde los pies hasta la cabeza y nos ha dejado con papeles muy memorables. Cualquiera que haya visto alguna de las temporadas de Peaky Blinders coincidirá que el papelazo que se marca al interpretar a Tommy Shelby es digno de un Óscar, como el que ganó con Oppenheimer. Hay muchos aspectos que se puede destacar de su personaje, pero hay uno que resalta especialmente y es el hecho de lo muchísimo que podía llegar a fumar.

Prácticamente era rara la escena en la que no veíamos a Tommy con un cigarro en la boca fumando a lo largo de las seis temporadas que duró esta serie tan magistral. Como el propio actor irlandés declaró en una entrevista, se metía tanto en el papel que acababa exhausto, aunque con la sensación de haber logrado algo muy grande, pero lo que sí tuvo claro es que después de todo esto no quería volver a interpretar a un personaje que fumara.

Y es que en aquella misma entrevista llegó a afirmar que pidió a los técnicos de utilería que contaran cuántos cigarrillos se consumían cada temporada, de manera que estos rondaban los 3.000, así que es probable que se llegaran a emplear más de 18.000 cigarrillos durante toda la producción de la serie. Naturalmente, la cifra es a repartir entre todos los personajes y, lo más importante de todo, es que no eran de verdad, porque sino cualquiera habría acabado con los pulmones destrozados.

Los cigarros eran falsos y ninguno de ellos contenía nicotina. En su lugar, por mucho que daban la impresión a la vista de que eran reales, estaban rellenos de hierbas. El motivo se debe a que estos son considerados bastante menos perjudiciales para la salud y menos adictivos, aunque eso no evita que puedan ser peligrosos si se consumen en exceso, de ahí que Cillian Murphy tuviera tan claro que no volvería a repetir algo así, al menos a corto plazo.

Es más, Robert Oppenheimer, a quien dio vida en el biopic dirigido por Christopher Nolan, falleció de cáncer de garganta por fumar demasiado tabaco en pipa, por lo que Murphy conoce plenamente los riesgos que hay detrás de esta práctica que ha dejado una buena huella en su carrera.

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