La regla de no matar de Batman se acaba de convertir en una tortura cruel para uno de los villanos más salvajes de Gotham
Publicado el 11/09/2025 por Diario Tecnología Artículo original
- Aviso: spoilers de Absolute Batman #12
La identidad de Batman cuenta con varias características que se han mantenido (más o menos) a lo largo de los años, desde utilizar el miedo y la intimidación hasta cumplir a rajatabla su regla de oro: no matar de forma directa o indirecta. Y aunque ha cumplido a lo largo de los años, existen algunas excepciones... varias implican al Joker.
DC ha puesto a prueba la voluntad de Batman de no matar con situaciones tan enrevesadas que harían colapsar a muchos héroes icónicos. Ahora, Absolute Batman #12 pone a prueba a Bruce una vez más con otra prueba, pero esta vez añade un componente muy poderoso: la amistad.
Batman se enfrenta a una versión de pesadilla de Killer Croc. El enfrentamiento no es desconocido para el murciélago, pero en este universo hay una diferencia notable: Waylon Jones es un amigo de la infancia de Bruce y hace tiempo que sabe que es Batman. La conexión emocional entre ambos es un catalizador que convierte el dilema en una tortura.
Resulta que esta versión de Killer Croc es salvaje en el sentido más estricto de la palabra. Es más grande y aterradora, casi parece una criatura mitológica del Hades. Y hay otra diferencia: Waylon Jones casi no puede comunicarse y sufre una agonía constante física y mental debido a la transformación. Así que pide clemencia y pone entre la espada y la pared a Bruce: suplica que lo mate y acabe con su sufrimiento. Si bien este Batman ha demostrado no tener remilgos a la hora de amputar y destrozar criminales, la cosa se complica cuando se mete un buen amigo de por medio.
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