Palo Alto Networks compra Chronosphere por 3.350 millones de dólares
En el dinámico y cada vez más complejo panorama de la ciberseguridad, las fusiones y adquisiciones son una constante que redefine las fronteras del merca
En el dinámico y cada vez más complejo panorama de la ciberseguridad, las fusiones y adquisiciones son una constante que redefine las fronteras del merca
En la era digital actual, donde la vida cotidiana y la economía global dependen de sistemas informáticos masivos e interconectados, la fiabilidad se ha convertido en una preocupación primordial. Desde redes sociales hasta infraestructuras críticas, esperamos que estos sistemas funcionen sin interrupciones, pero la realidad nos muestra que el colapso es una eventualidad. La naturaleza de estos fallos, sin embargo, es a menudo malinterpretada. Como bien apunta Carlos Lizaga de HUAWEI Cloud, "El colapso en sistemas a gran escala raramente es causado por un fallo singular". Esta afirmación es un pilar fundamental para comprender la complejidad inherente a la ingeniería de sistemas modernos y nos invita a reflexionar sobre cómo diseñamos, operamos y mantenemos la infraestructura digital de nuestro mundo. No se trata de una única pieza de software o hardware que se rompe, sino de una orquesta desafinada de eventos que convergen en un punto crítico, desencadenando una cascada de problemas que exceden la capacidad de respuesta del sistema. Es una lección que hemos aprendido, a menudo por las malas, y que sigue siendo de vital importancia para cualquier organización que aspire a la resiliencia en un entorno tecnológico cada vez más volátil.
El panorama de la ciberseguridad, en constante evolución y marcado por la complejidad creciente de las infraestructuras de TI, demanda soluciones cada ve