Es el gran deportivo estadounidense, pero ahora puede que esté centrándose demasiado en contentar a Europa
Publicado el 29/07/2025 por Diario Tecnología Artículo original
El pasado mes de junio, General Motors presentó su nuevo Chevrolet Corvette ZR1X, una visión totalmente extrema de hasta dónde sería capaz de llegar la última iteración del popular deportivo norteamericano. Parece claro que algo está cambiando en las entrañas del gigante estadounidense, y movimientos aperturistas tan destacables como es su participación en el Campeonato del Mundo de Fórmula 1 no dejan de ser primeros pasos en lo que parece que vendrá seguido también de un asalto al mercado europeo.
Esa estrategia puede pasar especialmente por alguno de sus productos más conocidos. La llamativa ‘europeización’ del Corvette no puede pasar por alto, siendo muy evidente que el deportivo abandonó ese ADN derivado de los muscle, con un poderoso motor atmosférico en disposición delantera, para optar por el rendimiento, por ser un arma mucho más certera al retrasar el propulsor y mejorar la experiencia de conducción a su volante.
Pueden parecer simples movimientos que no tendrían por qué tener continuidad en la estrategia comercial de General Motors, sin embargo, puede que estemos únicamente ante los primeros pasos. Hace algunos meses, GM presentó el primero de tres concepts en los que se interpretaba el que podría ser el futuro de Corvette. El C9 se espera que no llegue antes del año 2028, por lo que estamos en un momento en el que no sería de extrañar que desde la marca se empiecen a lanzar ‘globos sonda’ para conocer si habría interés por una nueva filosofía para el deportivo
Mi compañero David Clavero presentó la primera visión de General Motors, en este caso de la mano de una nueva era en materia de diseño dentro de la compañía tras la inauguración del centro de General Motors en Europa, situado en este caso en Royal Leamington Spa, Inglaterra y bajo la dirección de Julian Thomson.
Este es el segundo de los tres Concept que Chevrolet ha encargado a sus centros de diseño para interpretar el futuro del Corvette
Se trataba de una visión muy concept, recatada y futurista, en el que se podían apreciar marcados pasos de rueda que dibujaban la silueta de un deportivo que tenía muy poco voladizo tanto delante como detrás y que parecía más rememorar otros deportivos rivales como el Audi R8, que lo que acostumbrábamos a conocer como ese espíritu Corvette, con un puesto de conducción muy retrasado, cerca del eje trasero.
Si a estas alturas te lo estás preguntando, sí, el segundo de los tres concepts, esta vez bajo la autoría del centro de diseño de Pasadena (el tercero corresponderá al equipo de Detroit), mantiene en parte las líneas básicas de la primera propuesta, con una estética que mira más a lo que puede ser un hiperdeportivo que a lo que podemos categorizar en un escalón inferior como superdeportivo.
El futuro de Corvette bañado por el sol californiano:
Bautizado con el nombre de California Corvette Concept, de nuevo estamos frente a un diseño de carrocería muy corto, en el que los ejes se encuentran a ambos extremos. Se trata de una imagen que hace menos guiños al Corvette Sting Ray que el Concept británico, pero que aun así parece recalcar en las características básicas, como son esa compleja aerodinámica que se puede especialmente observar en las canalizaciones de flujo de los laterales y en el descomunal difusor posterior. Las dimensiones son muy parecidas entre ambos diseños, con unas medidas de 4.669 milímetros de longitud (2.767 mm de distancia entre ejes), 2.184 mm de anchura y apenas 1.051 mm de altura, mientras que en las llantas empleadas sí que se reduce una pulgada en ambos ejes, usando 21″ en el delantero y 22″ en el trasero. En este caso también se ha optado por aerodinámica activa para así dejar el diseño lo más puro posible y si a estas alturas estás buscando dónde están los escapes ya te habrás dado cuenta de que aparentemente estamos frente a un Corvette eléctrico, el cual contará con una disposición de las baterías en forma de T para así dejar espacio para situar los asientos de conductor y acompañante lo más bajos posibles.